Especiales

Foto principal: cortesía Julieth Jiménez. Foto secundaria: cortesía comunicaciones Urabá.

Esta propuesta surge de la necesidad que tiene la opinión pública de la región de contar con medios de comunicación técnicamente realizados, pues aunque existen periodistas que gozan de mucha trayectoria, no tienen conocimiento sistematizado y profesional acerca de formatos o géneros periodísticos.

Mediante jornadas de actualización, talleres y encuentros entre los periodistas, la Universidad trabaja por el mejoramiento en la calidad de los productos periodísticos, la construcción empresarial de los medios de comunicación, es decir, cómo pensar en organizaciones periodísticas y empresas de la comunicación que aporten garantías para el trabajo digno. 

El docente de la Facultad de Comunicaciones, David Roldán, dijo que el papel de la Alma Máter es comprender esa realidad, adaptar algo de lo profesional, sin atropellar las identidades y las formas de interacción que los periodistas tienen, y proponer modelos alternativos de comunicación social para cumplir los objetivos finales que tiene el periodismo y la comunicación: atender las necesidades de la población.

“El proceso ha sido muy importante porque ha coincidido con la formación de la Asociación de Comunicadores y Periodistas de Urabá, el periodismo es muy activo y muy incisivo en los diferentes procesos que se viven en la región”, manifestó David Roldán.

El reto más grande de este proyecto es poder canalizar toda la energía que tienen los periodistas hacia el mejoramiento técnico de los procesos de comunicación. La Alma Máter reconoce que no llega a un territorio virgen; ya existe una comunidad de periodistas y comunicadores que han hecho un trabajo durante mucho tiempo y eso debe reconocerse, sin embargo, se trabaja por mejorar los procesos que se llevan a cabo en Urabá.

Según el profesor Roldán, los periodistas buscan prepararse para tener poderío frente a los demás poderes públicos que aparecen en la región: cómo a partir de la palabra se puede debatir y construir un simbolismo que combate los problemas históricos como la corrupción, el clientelismo, la pobreza y la desigualdad que se han vivido en el territorio.

Los retos son enormes: desde la estrategia de Extensión de la seccional Urabá se apoya este proceso de integración de periodistas, acompañándolos en formación, mejorando la calidad de las labores periodísticas y así, en un futuro lograr medir el impacto de esa mejora en los productos del gremio. “La idea es relacionar este proceso de extensión con proyectos de investigación, con el propósito de tener una integración institucional, de tal manera que el proceso sea de largo plazo y con el acompañamiento de la Universidad”, señaló el docente.

Un aliado importante en este proceso es la administración municipal de Apartadó, en cabeza del alcalde Eliecer Arteaga, quien a través de su jefe de Prensa, Joe Romaña, buscó generar espacios de encuentro, capacitación y discusión de temas en torno al ejercicio periodístico, respetando la independencia de los periodistas.

Según Joe Romaña, en la región se ha desarrollado una importante labor, loable desde el ejercicio del periodismo, pero este es un tema que hay que seguir cualificando, en este gremio hay que renovarse y actualizarse cada día. “Vemos que los periodistas y comunicadores han respondido y están mostrando interés, voluntad y deseo de capacitarse y participar en estos espacios, de seguir interactuando, de retroalimentarse, de discutir temas que hacen parte de esa agenda común y ese escenario público que nos atañe a todos, que nos integra y que es común entre los diferentes municipios de Urabá”.

Jorge Luis Pérez, estudiante de Comunicación Social-Periodismo de la Universidad de Antioquia, quien trabaja para algunos medios regionales y nacionales como camarógrafo y reportero, sostuvo que este proceso es muy enriquecedor porque hacen falta estos espacios de capacitación, de diálogo con el resto de los colegas para mejorar el ejercicio periodístico en la región de Urabá, pues finalmente el gremio se debe a quienes los ven y los escuchan, y para ellos también se deben profesionalizar y capacitar en la medida de lo posible.

“Algunos tenemos la oportunidad de estar en la Universidad profesionalizándonos, hay otros que por su tiempo no pueden asistir a un aula de clase, pero también necesitan de este tipo de encuentros para retroalimentarse con los que estamos en la academia y con los profesores”, añadió el estudiante.