Z7_89C21A40L06460A6P4572G3304

Teclas de Ayuda de acceso Rápido

ALT + 1 Inicio

ALT + 2 Noticias

ALT + 3 Mapa de sitio

ALT + 4 Búsqueda

ALT + 5 Preguntas frecuentes

ALT + 6 Atención al ciudadano

ALT + 7 Quejas y reclamos

ALT + 8 Iniciar Sesión

ALT + 9 Directorio telefónico

Letra:

Contraste:

Clic aquí para ir a la página gov.co
jueves, 25 de abril 2024
25/04/2024
Síguenos
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3305

Especiales

Z7_89C21A40L06460A6P4572G3307
UdeA Noticias
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3386

La universidad y la construcción de paz

06/09/2016
Por: Roberth Uribe Álvarez - Profesor Facultad de Derecho y Ciencias Políticas

La paz requiere de una nueva concepción y ejercicio de la ciudadanía, que promueva el diálogo entre los ciudadanos y entre ellos y el Estado, fomentado su participación activa en la vida pública y una perspectiva afirmativa de la reivindicación de los derechos civiles y sociales.

Por tradición histórica y por disposición constitucional, la universidad colombiana tiene como misión principal contribuir a la educación superior de los colombianos. La educación, a su vez, puede concebirse como un camino para la ilustración y la autonomía individuales, y para la convivencia pacífica y el buen vivir colectivos. 

El anuncio del acuerdo de terminación del conflicto entre el gobierno colombiano y las Farc fija importantes retos al quehacer de la universidad colombiana y su aporte a la paz. Si la educación es la misión arquetípica de la universidad, es válido plantear entonces que la educación que debe brindar la universidad, sea una educación para la paz. Pero, ¿qué entender por este concepto?

Siendo múltiples las concepciones de lo que significa educar para la paz, me aventuro a formular las siguientes consideraciones a este respecto. La primera cuestión que involucra la educación para la paz, atiende a las necesarias reformas que debe acometer la universidad para adaptar y transformar sus currículos de pregrado y posgrado, varias de sus prácticas académicas y pedagógicas que demarcan la docencia, la investigación y la extensión, e incluso varias de las subjetividades de los universitarios, a las perspectivas pacifistas y que cultivan la transformación positiva de los conflictos. Sólo una universidad enrutada por el pacifismo puede responder con un proyecto educativo para la paz.

Una segunda cuestión proviene del contexto derivado de la política pública de educación, de la que la universidad es destinataria pero también es constructora. En el posconflicto venidero la educación debe ser el epicentro de la política y la acción pública estatales. Asegurar el crecimiento de las plantas de profesores universitarios, posibilitar su capacitación de alto nivel y asegurar el crecimiento sostenible de recursos para la investigación y para la extensión solidaria, así como una adecuada infraestructura física y tecnológica son condiciones estructurales para la generación de una oferta adecuada de cupos proporcional a la demanda; son tareas del sistema educativo estatal indispensables para la creación de unas condiciones estructurales de equidad en el acceso a la educación superior vista como conditio sine qua non de un sistema político y social en paz. 

En tercer lugar, es importante que la universidad promueva una cultura de paz que, basada en el pacifismo, irradie los programas de formación ciudadana y constitucional. La paz requiere de una nueva concepción y ejercicio de la ciudadanía, que promueva el diálogo entre los ciudadanos y entre ellos y el Estado, fomentado su participación activa en la vida pública y una perspectiva afirmativa de la reivindicación de los derechos civiles y sociales. Paz en este sentido debería significar reconocimiento no disputado ni cuestionado de los derechos de los asociados, especialmente los de la salud, el mínimo vital de trabajadores y pensionados, la igualdad, la libre asociación civil y sindical, el disenso político y la libertad de expresión, cuya reivindicación en la Colombia del conflicto ha equivalido a muerte, desaparición forzada, exclusión, desplazamiento y destierro.

Como cuarta cuestión, la universidad tiene el reto de hacer trasversal a sus programas y currículos, desde la formulación de proyectos educativos institucionales y de política curricular, los estudios, la cultura y la construcción de paz. Los programas académicos pre y posgraduales, los proyectos de investigación y de extensión, los sujetos universitarios y sus subjetividades, los administradores universitarios debemos ser conscientes del deber ético que implica la construcción de paz en los niveles curricular, pedagógico y de la gestión y la planeación universitarias. La paz transforma las concepciones y las prácticas más acendradas en torno a las disciplinas y sus tradiciones epistémicas y profesionales. El ingenio y la apertura hacia una academia pensada desde y para la paz es sin duda un reto que nos compromete como ciudadanos ilustrados que abogan por la educación como un instrumento de convivencia pacífica.

En quinto lugar, la universidad como institución de gran tradición, debe aprestarse con un sentido histórico y prospectivo a la promoción de la paz como un proyecto ético-público sostenible en el tiempo. A este respecto, vale señalar que son muchas las décadas y las generaciones que estamos y estarán involucrados en la construcción de la paz en Colombia. Solo si trascendemos como sociedad, de los proyectos inmediatistas y de coyuntura, para asegurar a la paz un lugar en nuestra cosmovisión como nación, concientizándonos entonces de la importancia que tiene la sostenibilidad de este proyecto de civilidad al que llamamos paz, podremos ser incondicionales con este, con independencia  de que sepamos que se trata de un camino que no está ni estará libre de obstáculos, pero que vale la pena proseguir ante el camino inconducente e injustificable de la guerra.

Z7_89C21A40L06460A6P4572G3385
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3387
Correo del contacto
Correo del contacto
[57+4] 219 5026
Z7_89C21A40L06460A6P4572G33O4
Z7_89C21A40L06460A6P4572G33O6
Lo más popular
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3340
 
Universidad de Antioquia | Vigilada Mineducación | Acreditación institucional hasta el 2033 | NIT 890980040-8
Recepción de correspondencia: calle 70 No. 52 - 21 | Apartado Aéreo 1226 | Dirección: calle 67 No. 53 - 108 | Horario de atención
Conmutador: [57 + 604] 219 8332 | Línea gratuita de atención al ciudadano: 018000 416384 | Fax: [57 + 604] 263 8282
Peticiones, quejas, reclamos, sugerencias, denuncias, consultas y felicitaciones
Política de tratamiento de datos personales
Medellín - Colombia | Todos los Derechos Reservados © 2020