Z7_89C21A40L06460A6P4572G3304
Clic aquí para ir a la página gov.co
Emisora UdeA
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3305

Opinión

Z7_89C21A40L06460A6P4572G3307
UdeA Noticias
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3386
Opinión

El mensaje de los búhos

18/02/2020
Por: Natalia Rodríguez V., profesora Escuela de Nutrición y Dietética UdeA

« ...Estos fascinantes animales también nos han puesto a pensar que haber llegado aquí, tan cerca de la gente, es también el reclamo porque su hábitat está siendo devorado por la ciudad, impunemente. Es bello tenerlos aquí pero eso nos habla de cómo se está perdiendo el entorno propio para ellos y otras especies...»

Son tres, llegaron hace algunos días y desde el lunes pasado se han convertido en parte de nuestra vida en la universidad.

En silencio están allí, quizás quieren estar ajenos a quienes todos los días los buscamos para verlos, fotografiarlos y admirarlos.

Una familia de búhos, padre, madre e hijo, un pequeño que poco a poco se prepara para volar, habitan por estos días nuestra Ciudadela Robledo.

Se han convertido en el asombro de cada día, en el motivo para hacer una pausa, en tema de conversación y en fascinación.

Con ellos se generó también una espontánea cadena de protección a sus vidas que empezó con quienes tuvieron la buena idea de demarcar el área aledaña a los árboles donde permanecen y ubicar en el contorno letreros en los cuales aparece la imagen de un búho y el mensaje: “Por favor no me molestes. Mi madre está cerca”.

El pequeño búho aparece a veces en el suelo, parado ahí, observando; luego, alguno de los muchachos de la Facultad de Veterinaria lo toma con cuidado y lo ayuda a subir a una rama, a riesgo de que venga la mamá a defender a su bebé.

Los búhos, que muchos de nosotros vemos por primera vez de cerca, han generado un sentimiento común, primario y espontáneo: cuidarlos, respetarlos, tratar de entender su naturaleza. Algo que no necesitamos acordar pero que se ha construido.

Como ayer, cuando fuimos a decirle a unos encapuchados que iban a tirar papas en la sede que no lo hicieran, porque estamos cuidando los animales. Dijeron: “qué pena, no sabíamos” y salieron.

Otros fueron a decirle a los muchachos que protestaban afuera que no entraran. El final de la tarde tuvo que ser muy difícil para los búhos, cuando llegaron los gases lacrimógenos, el humo y el ruido. Había incertidumbre esta mañana porque sólo habíamos visto al polluelo; luego con alivio, vimos de nuevo a los grandes.

Estos fascinantes animales también nos han puesto a pensar que haber llegado aquí, tan cerca de la gente, es también el reclamo porque su hábitat está siendo devorado por la ciudad, impunemente. Es bello tenerlos aquí pero eso nos habla de cómo se está perdiendo el entorno propio para ellos y otras especies.

En medio de tantos mensajes, motivos y expresiones en la dinámica de la universidad, estas tres aves, desde su silencio y su sólo estar presentes, nos han puesto de frente la importancia de defender todas las vidas, que somos parte de lo mismo.

Queda mucho por aprender y una de las lecciones inmediatas es que, sin el principio básico de cuidar la vida, nada tiene sentido.


Nota

Este es el espacio de opinión del Portal Universitario, destinado a columnistas que voluntariamente expresan sus posturas sobre temáticas elegidas por ellos mismos. Las opiniones aquí expresadas pertenecen exclusivamente a los autores y no reflejan una opinión o posición institucional de la Universidad de Antioquia.

Z7_89C21A40L06460A6P4572G3385
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3387
Correo del contacto
[57+4] 219 50 19
Z7_89C21A40L06460A6P4572G33O4
Z7_89C21A40L06460A6P4572G33O6
Lo más popular
Z7_89C21A40L06460A6P4572G3340